viernes, 19 de diciembre de 2014

"Te asusta y a la vez quieres que pase"...


...y supongo que eso es enamorarse. El miedo por el miedo a quererse los defectos, el miedo a estar bien no estando sólo, al tener una kriptonita, a no saber empezar las cosas que se puedan acabar, a levantar el corazón del sofá. A equivocarse muchas veces con veranos con fecha de caducidad por el temor de que en Septiembre llegue Navidad. A qué tus duchas sepan más a frases que no me has dicho que a frases que me dijiste. A pensar que sólo cuando nos cansamos de medir las distancias con metros y las empezamos a medir con besos, estaremos de acuerdo. Nosotros como el Big Fish, nunca hablamos de lo que no hablamos. Ni de chicos que no son tu, ni de chicas que sean yo, que prueban nuestros labios. Nos ahorramos los malos tragos, los viernes en otras manos a base cola y ron. De no extrañarnos más de lo que podemos soportarnos, del odiarnos por dar demasiada importancia a lo que (no) hablamos.
Aunque ya no sea tenía que pasar para que nunca nos pasásemos de largo. Para hacer pegados todas esas cosas que las pasamos alejados. Aunque ya no sea teníamos que querer que pasara porque queremos no es tan complicado, porque si tu me odias y yo te odio, menos por menos da más, aunque ya no podamos dar menos. Que habernos encontrado fue sólo que cada uno de nosotros dio dos pasos mal dados. Que a día de hoy cada noche me dura un fin de semana echándote de menos. Que quererme antes de tocarme lo tenías chapado, que siempre has querido dejar de conocer la luna a kilómetros y conocerla a centímetros. Que todos sabemos que tu necesitas a alguien como yo y yo creía necesitar alguien como tu.

No hay comentarios:

Publicar un comentario